El deporte es un hábito de vida muy saludable que debemos practicar todas las personas. Es importante que lo inculquemos a los niños y niñas desde que son pequeños, pues en la infancia es cuando despierta en ellos la curiosidad y podrían interesarse en practicar alguna actividad deportiva.
El deporte transmite muchos valores que contribuirán en la vida cotidiana de los pequeños de la casa. Se trata de conductas adaptativas que se educan con el tiempo, no se obtienen de nacimiento. Por eso, tanto padres como profesores deben realizar un esfuerzo para que estos niños, gracias al deporte, aprendan a trabajar en equipo, a ser generosos y a saber perder.
Los juegos deportivos en los patios y parques son cada vez más populares debido a los beneficios que aportan a los niños, ya que mientras se divierten y aprenden, adquieren compromiso, esfuerzo, perseverancia y humildad, entre otros. En Maderas y Recreo queremos hablarte en el artículo de hoy de la importancia de los juegos deportivos escolares. En nuestro blog encontrarás información de interés de diversos temas sobre parques infantiles.
Beneficios de los juegos deportivos para los niños
Muchos padres apuntamos a nuestros hijos a actividades para que practiquen juegos deportivos y se diviertan, sin tener en cuenta que el deporte les va a aportar muchos otros beneficios, que se pueden dividir en cuatro grupos: la parte física, la parte psicológica y emocional, la parte educativa y social, y la parte de diversión y ocio.
Desarrollo físico
Los juegos deportivos ayudan a nuestros pequeños a desarrollar muchas habilidades físicas, como la coordinación, el equilibrio, la fuerza o la elasticidad. De esta forma, los niños crecen sanos con un correcto desarrollo del organismo, evitando problemas tan habituales como la obesidad infantil.
Desarrollo psicológico y emocional
Los niños se enfrentarán a situaciones en las que tengan que pensar rápidamente evaluando las opciones y tomando decisiones en el momento. Los juegos deportivos también les ayudan a gestionar, controlar y canalizar sus emociones en diferentes niveles: nervios, frustración, euforia, enfado… Además, cuando el cuerpo se encuentra en movimiento libera endorfinas, favoreciendo que sean más positivos, estén más felices y tengan una mayor autoestima.
Aprendizaje educativa y social
El deporte en equipos fomenta el respeto y aprender a cumplir las normas. Es muy importante que, desde pequeños, los niños sepan trabajar en equipo, valorando las cualidades de cada persona, siendo pacientes y aceptando los resultados que se obtienen. Esto es algo que se enseña en casa y desde las aulas, pero es con los juegos deportivos cuando se lleva a la práctica. Estas actividades ayudan a los niños a sociabilizar y hacer amigos, a apoyarse unos a otros y a crear espíritu de equipo.
Diversión y ocio
Y, por supuesto, los juegos deportivos son muy divertidos. A los pequeños de la casa les suele encantar jugar y hace deporte, sobre todo si es con amigos o con sus familiares. Verlos disfrutar con estas actividades al mismo tiempo que sabes todos lo beneficios que les aportan es una sensación estupenda.
El deporte promueve el desarrollo de los niños
La etapa más importante de nuestra vida en términos de desarrollo comienza cuando todavía somos bebés y durante nuestra infancia, pues es cuando empezamos a conocer el mundo que nos rodea, descubrimos nuestras habilidades físicas y mentales y desarrollamos nuestra personalidad.
Los expertos aseguran que, gracias al deporte, los niños empiezan a pensar de manera crítica y a solucionar sus problemas. Por eso, desde que son pequeños tienen clases de educación física en el colegio y, además, una variada oferta de actividades extraescolares fuera del periodo lectivo.
Los parques deportivos también son una opción estupenda para llevar a tus hijos y que jueguen con otros niños. Practicar deporte promueve el sentido de la amistad, la solidaridad y el juego limpio, los pequeños aprender a respetar a los demás. A esto nos referimos cuando decimos que el desarrollo de la inteligencia está relacionado con la movilidad y el deporte.
Es importante que, si al niño le gusta el deporte, le animemos a practicarlo y procuremos que disfrute y aprenda realizándolo. Por el contrario, si no le entusiasma demasiado, podemos probar a mostrarle otros deportes o jugar con ellos a juegos que impliquen moverse, como el pañuelo o saltar a la comba. Es una forma efectiva de que les resulte fácil realizar alguna actividad física.